UNA ARMA NUEVA DE DOBLE FILO CONTRA EL CÁNCER

 

2017-06-20_21.38.35
CÉLULAS INMUNITARIAS SINTÉTICAS MÁS POTENTES Y PERSITENTES QUE NINGUNA OTRA CÉLULA DEL ORGANISMO HUMANO

Ya es posible tratar ciertos tumores avanzados con células inmunitarias sintéticas que son más potentes y persistentes que ninguna otra célula del organismo

Hace décadas que los inmunólogos que estudian los tumores saben que el sistema inmunitario puede ser un gran aliado contra el cáncer. Pese a ello, los primeros intentos por aprovechar su potencial resultaron decepcionantes. No se supo estimular lo suficiente un componente clave del sistema inmunitario, esa especie de sargento mayor que es el linfocito T. Sin reforzar la capacidad de este leucocito para descubrir y atacar a las células cancerosas, a todos los efectos se estaba pidiendo al sistema inmunitario que marchara a la guerra con el equivalente biológico de aviones de papel y pistolas de feria.

Los primeros indicios de la necesidad de fortalecer a los linfocitos T en su lucha contra el cáncer surgieron en los años ochenta del siglo XX. Entonces se intentó reforzar la respuesta inmunitaria extrayéndolo linfocitos T del paciente para multiplicarlos en el laboratorio y reinyectarselos después. Este estrategia sirvió de algo a ciertas personas, pero no solía funcionar durante mucho tiempo: proclives al agotamiento, las células dejaban de actuar poco después de su administración.

A raíz de ello, varios grupos de investigación empezaron a enfocar el problema con distintos prismas. Hoy , una nueva estrategia está resultando tremendamente prometedora. Ya a mediados de los noventa, mientras intentaban descubrir nuevos tratamientos contra el VIH, dos de autores (June y Levine) crearon una técnica mejorada que, en comparación con los métodos precedentes, reforzaba extraordinariamente los linfocitos T extraídos de los pacientes, tanto un número como en potencia y presidencia de sus efectos. Años después, hace una de cada , vio la luz un método que alterada genéticamente los linfocitos T para que pudieran reconocer y atacar a ciertos tipos de cáncer origina dos en los glóbulos blancos de la sangre, como la leucemia y el linfoma.
Desde hace pocos años , esas células inmunitarias sintéticas , los linfocitos T provistos de receptores quiméricos de antígenos (T-CAR,  por sus siglas en inglés), han sido puestas a prueba en docenas de estudios en qué han participado casi mil enfermos en casos avanzados de leucemia y linfoma. Las cifras varían según el tipo de enfermedad , pero hoy en día más de la mitad está gozando demás tiempo de vida del pronosticado y cientos parecen haber desterrado el cáncer.
Entre los investigadores se está generando un consenso en torno a la idea de que el tratamiento con los linfocitos T-CAR, ya sea solo o combinado, acabará proporcionando una cura duradera para ciertos tipos de cáncer sanguíneo. Habrá que superar obstáculos, como confirmar que este tipo de terapia puede ser eficaz contra otros tumores y mejorar el control de los efectos secundarios, algunos potencialmente mortales. Pero los éxitos cosechados hasta la fecha, tras resolver complicados retos a lo largo de casi 20 años, resultan esperanzadores.

Reforzar los linfocitos T

Cuando iniciamos la senda que nos acabó conduciendo hasta los linfocitos T-CAR, nuestra primera tarea (hallar el modo de reforzar la actividad citocida de los linfocitos extraídos de los pacientes) era cualquier cosa menos sencilla. Para ser activado, el linfocito T debe recibir señales procedentes de otros integrantes del sistema inmunitario: las células dendríticas. Solo después de recibir esas órdenes puede linfocito desplegar todo su potencial. Se divide y genera copias de sí mismo (todas dirigidas contra la misma diana) libera sustancias denominadas citocinas que estimulan la respuesta defensiva del organismo. Al cabo de unos días, los linfocitos T se desmovilizan, lo que permite que el organismo (y el sistema inmunitario) recupere la normalidad.
A mediados de los 90, mientras estudiaban el VIH, ambos investigadores y autores de este artículo (J y L) decidieron mejorar ese proceso natural estimulando los linfocitos T en el laboratorio. El objetivo consistía en extraer del paciente algunas de esas células, activarlas, hacer que se multiplicarán muchas más veces de lo que sería posible en su cuerpo antes de volverse las a inyectar esperando que estimularse en la actividad inmunitaria contra el VIH y las demás infecciones que afligen a las personas con SIDA, la última fase de la infección vírica.
Pero primero había que dar con la forma idónea para activar los linfocitos T. En teoría, podíamos es ponerlos a las células dendríticas del mismo paciente, pero éstas varían notablemente el número y calidad, sobre todo los enfermos de VIH o cáncer. Para solventar ese problema, decidieron crear un sustituto artificial. Se decantaron por unas diminutas esferas magnéticas que recubrieron con dos proteínas capaces de imitar y mejorar el efecto estimulador de las células dendríticas.
Posteriormente, extrajeron los linfocitos T de la sangre de los pacientes y los estimularon con las esferas multiuso. Hacia el final del proceso, de entre 5 y 10 días de duración, cada linfocito T tomado del paciente habrá engendrado otros 100. Este método de las microesferas es ahora una de las principales herramientas de que se dispone para crear los linfocitos T activados que se destinan a numerosos experimentos y ensayos clínicos.

Rediseñar los linfocitos T

A la hora de organizar la respuesta defensiva contra el cáncer, el cuerpo en cara dos graves problemas. El primero estriba en que las células malignas surgen de las células propias. Como el sistema inmunitario ha evolucionado para no atacar a nuestros tejidos, a menudo tiene problemas para distinguir las células tumorales de las que no lo son. El segundo es que muchas de esas células esgrimen artimañas para eludir la respuesta inmunitaria: han aprendido a pasar desapercibidas y entorpecer su actuación.
Como parte del mecanismo que protege los tejidos sanos del <<infierno amigo>>, el linfocito T inspecciona la célula sospechosa para comprobar si en su superficie presenta dos moléculas necesarias para que sobrevenga el ataque. La primera es un voluminoso complejo proteico denominado MHC, que contiene un fragmento proteico, o antígeno, la diana de las células dendríticas <<presentan>> a los linfocitos T. La segunda, el ligando coestimulador, constituye la señal necesaria para desatar el ataque. Si el complejo antígeno-MHC y el ligando coestimulador no concurren, el linfocito T sigue su camino sin más. Por tanto, la célula maligna dispone al menos de dos ardides para que la dejen en paz: a pesar de producir las moléculas MHC en su superficie o presentar en ella un variante aberrante del ligando coestimulador que desactive los linfocitos T.
¿Qué ocurriría si fuera posible modificar genéticamente los linfocitos T para que fuese el investigador, y no las células dendríticas, quienes cogiese el antígeno Diana, por ejemplo uno que abunde en las células tumorales pero que no se ha presentado por el MHC?, es más ¿Y que sucedería si tales linfocitos no tuviesen que pasar por las dos etapas normales para atacar a las células tumorales? Solo con el advenimiento de las técnicas basadas en los linfocitos T-CAR se pudo intentar esto con prespectivas de éxito.
La solución, en principio, consistió en dotarlos de los genes que diesen lugar a una molécula sintética (CAR) que pudiese hacer dos cosas a la vez: detectar el antígeno seleccionado y activar el linfocito T, aún sin las señales habituales para proceder. Tal objetivo era posible si se combinaban elementos de unas proteínas especializadas denominadas anticuerpos (que normalmente actúan contra bacterias y virus) con otras proteínas caracterizadas por estimular a los linfocitos T. Mas en concreto, diseñaron la parte exterior del CAR que actúa como un anticuerpo, y que sobresale un poco de la superficie de la célula, para que se uniese al antígeno tumoral que hubieron escogido. Y construyeron la parte restante, que atraviesa la membrana de linfocito, con objeto de que judías en emitir las señales oportunas y activar a su portador tan pronto como detectarse el antígeno en cuestión.
Por supuesto, la idea de recurrir a los antígenos específicos del cáncer para combatir las neoplasias malignas no es nueva. Y los años 90, los médicos comenzaron a tratar a los pacientes con anticuerpos monoclonales, que buscan proteínas específicas presentes mayoritariamente en la superficie de las células de diversos tumorales. Pero los anticuerpos solo perduran unas semanas en el organismo. Los linfocitos T que no modificados, en cambio, vivirían lo mismo que los no tratados: varios años.
El quid de la cuestión radicaba en lograr que los linfocitos T produjesen la molécula mixta anticuerpo-activador que habían escogido. Decidieron aprovechar la consabida predilección del VIH por estos linfocitos: eliminar los genes que convierten a este virus en Mortal y los sustituyeron por otros provistos de la información necesaria para fabricar la quimera de anticuerpo y activador. A continuación, permitieron que las partículas víricas del VIH, ahora inocuas, infectasen a los linfocitos T extraídos de los pacientes. Los virus alterados actuaron como caballos de Troya e introdujeron los genes en el interior de las células; a partir de ahí, los linfocitos hicieron al resto, fabricando los CAR, y llevándolos hasta su superficie. Por medio de esta y de otras técnicas, diversos grupos de investigación, entre ellos el de estos mismos autores, haz logrado remodelar los linfocitos T para que ataquen a las células tumorales sin otro requisito que el de reconocer a una molécula de su superficie, es decir sin la intermediación del MHC ni de un ligando coestimulador. Además, es posible diseñar a medida el nuevo linfocito para que reconozca con exactitud cualquier antígeno escogido, quizá también una combinación de varios.
A mediados de los noventa y principios de 2000, en colaboración con otros investigadores, descubrieron la forma de convertir los linfocitos T de pacientes con VIH en T-CAR y los utilizaron en ensayos clínicos con humanos. Hoy continúan refinando la técnica y esperando disponer en pocos años de terapias más avanzadas contra el virus.
Mientras tanto, varios grupos estaban empezando a usar los linfocitos T-CAR en pacientes con cáncer. Se propusieron estos dos investigadores aunar las técnicas aprovechando todo lo aprendido acerca de la activación de los  con microesferas, el uso de los CAR para rediseñarlos y redirigirlos y, de la transformación linfocitos T del VIH en un caballo de Troya para introducir los CAR en ellos. Pronto descubrieron lo poderosos que podían ser esos linfocitos.

El nuevo diseño, a prueba

Ya se contaba con la potencia del fuego necesaria y estaban bastante seguros de que la diana escogida era buena. La señal idónea para dirigir nuestros linfocitos T-CAR contras objetivo sería, por supuesto, un antígeno solo presente en la superficie de las células tumorales, por desgracia algo excepcional. Como toda célula tumoral surge de lo que fue una célula normal, ambas presentan prácticamente los mismos antígenos. Crear un linfocito T-CAR contra esos antígenos comunes destruiría inevitablemente gran cantidad de tejido sano, además del tumor.
Existen, empero, destacadas excepciones a esa norma. Ciertos tipos de leucemia linfoma surgen a partir de los glóbulos blancos denominados linfocitos B. Las personas pueden vivir sin ellos, la fuente que surte de anticuerpos al organismo, a condición de que se les suministre de vez en cuando un cóctel de anticuerpos prefabricados. El linfocito B, al igual que cualquier célula maligna en la que se puede convertir, por está en su superficie una proteína llamada CD19. El grupo de los investigadores June y Levine, como otros en el mismo campo, creían que la CD19 podía ser una diana interesante para la terapia con los linfocitos T-CAR, puesto que no se haya en ningún otro tejido sano.
Probaron la ideal en ratones. Por entonces, a inicios de esta década, emprendieron un ensayo clínico con T-CAR dirigidos contra la CD19. Los primeros 3 pacientes serán adultos con casos avanzados de leucemia linfocítica crónica que no respondía a ningún tratamiento.
El primero era William Ludwig un funcionario jubilado diagnosticado desde hacía una década que era portador de más de 2,3 kg de células leucémicas en su organismo. En agosto de 2010 se le suministraron mil millones de su linfocitos convenientemente que no modificados en T-CAR. Al cabo de 10 días sufrió un grave cuadro de fiebre, hipotensión y disnea que exigió su ingreso en la unidad de cuidados intensivos. Después los investigadores  se dieron cuenta de que los síntomas estaban motivados por la hiperactividad del sistema inmunitario, que se había desbocado a consecuencia del enorme número de citocinas puesto en circulación, una reacción conocida como síndrome de liberación de citocinas que puede abocar a la muerte.
Por suerte, Ludwig salió adelante y un mes después no se halló en el ni rastro de los linfocitos B leucémicos. Ante tan extraordinario e inesperado hallazgo se le practicó una segunda biopsia, con idéntico resultado que la primera. A continuación trataron a los otros dos pacientes, que también respondieron de forma extraordinaria. Casi siete años después, Ludwig y otro de los pacientes siguen vivos y sin rastro de la leucemia. Análisis ulteriores demostraron que los linfocitos T-CAR habían proliferado en el torrente sanguíneo y en la médula ósea, dónde nacen las células de la sangre; cada T-CAR (o sus hijos) inyectado a estos tres pacientes pudo acabar con entre 1.000 y 93.000 células tumorales. Cuando meses más tarde se les extrajeron algunos de muestras de sangre, aún eran capaces de aniquilar las células leucémicas portadoras de la molécula CD19. Estos tenaces centinelas se habían convertido en un << medicamento vivo>> que seguía patrullando el cuerpo en busca de cualquier rebote de la enfermedad.

AMPLIAR EL REPERTORIO

A pesar de los significados que fueron sus resultados iniciales, el dinero se acabó y no pudieron probar su tratamiento experimental en más pacientes. Los comités evaluadores de la agencias federales de investigación de  EE.UU. consideraron que era demasiado arriesgado y que, por tanto, no merecía más fondos. Pese a ello, enviaron dos artículos que describían los casos de esos tres primeros pacientes que fueron aceptados sin dilación y publicados en agosto de 2011 en New England Journal of Medicine y Science Translational Medicine. La cobertura mediática fue sonada, como numerosas las consultas a la Universidad de Pensilvania – donde trabajaban estos investigadores- por otro lado las empresas biotecnológicas nacientes y de grandes laboratorios farmacéuticos, interesados en obtener el permiso para usar la técnica.
Finalmente, una de sus solicitudes de financiación próspero y pudieron iniciar otro ensayo clínico en 2012, esta vez son niños. Posteriormente decidieron firmar una alianza entre la Universidad de Pensilvania y Novartis para financiar el desarrollo y la futura presentación de sus resultados a la Agencia Federal de Fármacos y Alimentos de EE.UU. (FDA), con vistas a su comercialización. La noticia de esta colaboración desató un frenesí de licencias e inversiones, en el que multitud de centros médicos de todo el mundo fundaron empresas biotecnológicas dedicadas a la producción de nuevas variantes de T-CAR.
Sus últimos resultados con niños mostraron un índice de supervivencia a los 12 meses del 62%, cifra que se preciso contrastar con el derivado de los tratamientos ordinarios, que no alcanza el 10%.
En los últimos años, muchos grupos (el Centro del Cáncer Memorial Sloan Kettering, el Hospital Infantil de Seattle, el Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson junto a la empresa Juno Therapeuthics, el Instituto Nacional del Cáncer en colaboración con la empresa kite Pharma, etc.) Han comunicado resultados inauditos en casos avanzados de leucemia-linfoma. En el centro de estos dos investigadores que han tratado a 300 pacientes con linfocitos T-CAR dirigidos contra neoplasias malignas de los linfocitos B. Las tasas de respuestas varían según la enfermedad, pero cerca de la mitad de sus afectados por la leucemia linfocítica crónica avanzada han mostrado una notable mejoría (basada, entre otros factores, en la disminución de las células leucémicas), mientras que cerca del 90% de los niños con leucemia linfoblástica aguda han evidenciado una respuesta completa al cabo de un mes de tratamiento, sin que se hallara rastro de las células tumorales.
Nadie sabe realmente por qué los linfocitos T-CAR no funcionan en todos los pacientes con neoplasias asociadas a la CD19. Algunas recaídas parecen obedecer a la incapacidad de los linfocitos para multiplicarse en el paciente o a la aparición de nuevas células leucémicas carentes de la CD19, inmunes al tratamiento. Aún así, la magnitud de la respuesta desatada contra esas neoplasias no tiene precedentes. Se espera que este año dos empresas soliciten la aprobación de la FDA para utilizar los linfocitos T-CAR contra el cáncer: Novartis, contra la leucemia linfoide aguda infantil y, más adelante, para el linfoma;  y kite Pharma contra un tipo de linfoma.
Es evidente que quedan muchos retos pendientes. Como parte de la comunidad investigadora, siguen ideando formas de atajar y en lo posible evitar los efectos secundarios más graves. Si bien la mortalidad resulta para, algunas personas aquejadas de leucemia linfoblástica aguda han fallecido por problemas ligados con el tratamiento, pero también a diferencias en el diseño de los linfocitos T-CAR creados por distintas instituciones. Los investigadores se hayan en las primeras etapas de desarrollo. Es prioritario ampliar el acceso de los enfermos con cáncer de linfocitos B y otros tumores. Y en los años venideros tendrán lugar ensayos clínicos que someterán a prueba recientes avances científicos y técnicos. Si se pretende tratar otros tipos de cáncer, será necesario identificar y actuar contra ciertas combinaciones de antígenos que puedan ser más frecuentes en las células tumorales que en los tejidos sanos. Por ejemplo, en este momento uno de estos investigadores (Posey) intenta desarrollar un tratamiento inmunitario contra el cáncer de mama y el de páncreas. Estos y otros tumores sólidos son aún mejores que la leucemia y el linfoma a la hora de eludir el sistema inmunitario, pues estos últimos son más accesibles porque circulan por la sangre. Para detectar esas células, Posey está diseñando un linfocito T-CAR que busque dos dianas: la primera es cierta molécula de glúcido exclusiva de la superficie de las células cancerosas, con la que pueden producirse con más celeridad que las normales; la segunda es una proteína presente en ambos tipos de células. En teoría, esa combinación de dianas (glúcido y proteína) sólo sería frecuente en las primeras, lo que limitaría los daños causados por los linfocitos T-CAR en los tejidos normales.
Los avances no suelen caer del cielo. Las decepciones y los contratiempos son inevitables. Pero los científicos están convencidos de que los éxitos que han presenciado en los casos avanzados de leucemia y linfoma justifican a todas luces proseguir con el desarrollo de nuevos linfocitos T-CAR.

En síntesis

– Una célula inmunitaria sintética, el linfocito T provisto de receptores quiméricos de antígenos, linfocito T-CAR, ha demostrado una eficacia extraordinaria contra la leucemia y el linfoma.

– Los linfocitos T-CAR  estimulan y refuerza la capacidad del organismo para combatir las células malignas. Pero pueden provocar efectos secundarios y, en algunos casos, la muerte.
-En la actualidad se está diseñando nuevos linfocitos T-CAR  Con la esperanza de tratar otros tipos de cáncer y causar menos efectos secundarios perjudiciales
La respuesta inmunitaria normal es compleja

El sistema inmunitario sano es capaz de reconocer y destruir las células cancerosas, pero el proceso es complejo y tiene tendencia a malograrse. Las células dendríticas absorben y procesan algunas de las proteínas radicadas en la superficie o en el interior de la célula maligna. Más adelante, cuando una de esas células inmunitarias se vuelven a encontrar conciertos glóbulos blancos denominados linfocitos T, les <<enseñará>> fragmentos de tales proteínas, conocidos como antígenos. Esto proporciona que linfocito T haga dos cosas: (1) Que busque e identifique cualquier célula que contenga tanto el antígeno que le ha sido presentado por la célula dendrítica como otra proteína denominada MHC; y (2), qué ataque a la célula portadora del antígeno en el caso de que también presente una tercera proteína, el ligando coestimulador.
Una vez que el linfocito T identifica positivamente el antígeno, el MHC y el ligando coestimulador, inicia el ataque contra la célula tumoral y libera citocinas con las que atrae a otras células inmunitarias a la refriega. Pero si la célula tumoral ( en la foto de portada se encuentra la explicación con imágenes reproducidas por los investigadores) carece de MHC o de ligando coestimulador, se vuelve invisible para el sistema inmunitario y se libra de la destrucción.

Células inmunitarias sintéticas

En los últimos años, los investigadores han llevado a cabo una serie  de tratamientos experimentales destinados a potenciar la capacidad del sistema inmunitario para identificar y destruir las células tumorales. Entre dichos tratamientos, la administración de las células inmunitarias sintéticas denominadas linfocitos T-CAR diseñado a medida se han integrado dos poderosos resortes.

La terapia con linfocitos T-CAR  agiliza el proceso

Los linfocitos T-CAR (dotados de un receptor quimérico de antígenos) son mucho más potentes que ninguna otra cosa que pueda producir el organismo de forma natural. Mientras que los linfocitos T ordinarios cesan su ataque en pocas semanas, los genomodificados T-CAR permanecen activos por un espacio durante meses, incluso años, contra las dianas seleccionadas por el investigador, como por ejemplo la proteína CD19.

RESORTE 1

A diferencia de la mayoría de los linfocitos T, los T-CAR poseen un detector de antígenos (CAR) que les permite reconocer antígenos diana que no están unidos a una molécula del MHC sino que sencillamente se hallan sobre la superficie de la célula. Además, son los investigadores y no las células dendríticas los que deciden contra qué antígenos deben actuar. El material genético necesario para fabricar el CAR se introduce en los linfocitos T por medio de una cápsula de virus previamente vaciada.

RESORTE 2

Los linfocitos T-CAR no requieren que la célula diana posea un ligando coestimulador para actuar. Así pues, siempre están en guardia y solo necesitan la presencia del antígeno seleccionado -en este caso, la CD19- para atacar.

 

Fuente: Bruce L. Levine, ostenta la cátedra de terapia génica oncológica de la Universidad de Pensilvania.
Avery D. Posey Jr., Profesor de patología y medicina de laboratorio la Facultad de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania.
Carl H. June, catedrático de patología y medicina de laboratorio de la Facultad de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania

LA MALDICIÓN DE LA MEDICINA

 

2017-05-24_12.02.48
LA HIPÒCRITA ESPAÑA SOLIDARIA

La hipócrita España solidaria

La incompetencia de la ONU

 

Acusan a China de asesinar a 91.250 personas al año para extraerles los órganos

En China son asesinadas más de 91.250 personas al año. Cada día 250 personas; para extraerles órganos con los que comerciar, en  muchas ocasiones mientras aún estén vivos. Una auténtica industria de la muerte que obtendría entre 60.000 y 100.000 órganos para vender al mejor postor por miles de millones de dólares. Al menos así lo aseguran el exsecretario de Estado de Canadá de la zona Asia- Pacífico David Kilgour y el abogado canadiense especializado en Derechos Humanos David Matas, ellos el año pasado a fecha día 2 de febrero, reiteraron su denuncia en una rueda de prensa celebrada en Madrid a la que la inmensa mayoría de los medios de comunicación españoles no acudió a pesar de que un par de horas habían entregado en el Congreso de los Diputados un documento sobre el asunto en el que 251.035 personas solicitan la intervención de las autoridades españolas.

El informe presentado el pasado 19 de febrero se terminó en junio de 2016, ocupa 680 páginas, se presenta bajo el título Cosecha Sangrienta/ La masacre y los firman el ex secretario de Estado canadiense David Kilgour, el abogado de la misma nacionalidad David matas y el investigador, defensor de derechos humanos, escritorio antiguo miembro de la Fundación para la Defensa de las Democracias Ethan Gutmann. Éste último es autor de la obra The Slaughter (La masacre) publicada en 2014 en la que se denuncia que las personas a las que mayoritariamente se están extrayendo órganos son practicantes de Falun Gong y miembros de etnias minoritarias de ese país como los tibetanos y los uigures, también cristianos. Cabe agregar que el informe va acompañado de un escrito firmado por 251.035 personas que solicita la intervención de las autoridades españolas para parar esta matanza. Los denunciantes estiman que en la actualidad se asesina en China a unas 91.250 personas al año – 250 al día- extrayéndose entre 60000 y 100000 órganos para comerciar con ellos. Cifra que según los denunciantes niega el gobierno chino alegando que «sólo» obtienen anualmente unos 10.000 órganos y de forma «legal».
Esta denuncia ya fue presentada inicialmente hace ahora 10 años por David Kilgour y David Matas y Discovery  DSALUD informó ampliamente de ello en el reportaje que con el título extraen órganos a decenas de miles de personas para trasplantárselos

Todo esto empezó cuando la organización no gubernamental Coalición para investigar la persecución a Falun Gong -con sedes en EE.UU y Canadá- pidió Kilgour y Matas que investigaran la afirmación hecha el 17 de marzo de 2006 en el diario Epoch Times por una trabajadora del Hospital de Sujiatun (China) -que aparecía con el pseudónimo de Annie para proteger su identidad- según la cual su ex marido había estado involucrado en la extracción de órganos de seguidores de la disciplina espiritual Falun Gong.
Annie explica que sospechó que algo extraño ocurría al constatar que los pedidos de algunos productos -como el papel higiénico y el arroz- eran mayores de lo que razonablemente cabía esperar siendo entonces cuando su ex marido, cirujano del Hospital, le reveló que él  estaba llevando a practicantes sanos de Falun Gong para extraerles órganos y que él mismo había extraído personalmente corneas a más de 2.000 entre 2001 y 2003. Dejando claro que ninguno había sobrevivido porque otros colegas les habían extraído el resto de los órganos incinerándose a continuación sus restos.
Matas y Kilgour aceptaron investigar el caso averiguando que en China se habían hecho entre 2000 y 2005 unos 41.500 trasplantes de órganos, número tan alto que no podían proceder solo de personas declaradas clínicamente muertas. «Hemos llegado a la lamentable conclusión de que los alegatos son auténticos -así se explica en el informe que metieron el 6 de julio de 2006-. Creemos que ha habido -y continua pasando hoy- sustracción no voluntaria a gran escala de órganos a practicantes del movimiento Falun Gong. Afirman con su conclusión que el Gobierno de  China, a través de organismos de numerosas zonas del país – especialmente hospitales pero también centros de detención y ‘cortes populares’ -han asesinado desde 1999 a un gran número – desconocido- de prisioneros de conciencia de Falun Gong. Sus órganos vitales – incluyendo corazones, riñones, hígado y córneas- se les extrajeron simultáneamente de manera no voluntaria para venderlos a elevados precios; a veces a extranjeros que deben esperar mucho tiempo en sus países para tener órganos voluntariamente donados».
El informe incluye dramáticas reproducciones de conversaciones telefónicas grabadas en distintos hospitales de China por voluntarios que se hicieron pasar por personas que necesitaban urgentemente un órgano para ellas o para algún pariente.
A continuación prestemos atención, leamos pues una de las llamadas reales que ya se recogían en el informe de 2006 entre ‘M’ y el doctor Lu, uno de los médicos del Hospital Minzu de la ciudad de Nanning en la región autónoma china de Guangxi:
-¿Pueden encontrar órganos de practicantes de Falun Gong?
-No hay forma de obtenerlos. Es bastante difícil conseguirlos ahora en Guangxi. Si no puede esperar le sugiero que vaya a Guangzhou porque a ellos les he sencillo tener órganos. Pueden buscarlos en toda la nación. Al hacer un trasplante de hígado pueden obtener a la vez un riñón así que lo tienen fácil. Son muchos los centros que acuden a ellos cuando hay desabastecimiento.
-¿Por qué les es tan fácil obtenerlos?
-Porque es una institución importante; contactar con el sistema (judicial) en nombre de toda la universidad.
-¿Entonces obtienen órganos de practicantes de Falun Gong?
-En efecto.
-Los órganos que obtienen son de centros de detención o de prisioneros?
-De prisiones.
-¿Y pertenecían a practicantes saludables…?
-Correcto. Y elegimos los mejores para asegurar la calidad de la operación.
-Eso significa que eligen los órganos ustedes mismos…
-Correcto.
-¿Y generalmente qué edad tienen los proveedores de órganos?
-Normalmente alrededor de 30 años.
-¿Entonces ustedes van a la prisión a seleccionarlos?
-Correcto. Debemos seleccionarlos.
-¿Pero la persona sabe que le quitarán sus órganos?
-No, no lo sabe.

2017-05-24_12.08.07
LA MALDICIÓN EN LA MEDICINA

 

LA MASACRE CONTINUA DESDE ENTONCES

AÑOS DESPUÉS LA MASACRE CONTINÚA

La mayoría de los medios de comunicación españoles ocultó esta información, mientras en otros países hubo fuertes movimientos de protesta que obligaron al gobierno chino a anunciar el 2 de diciembre del año 2014 que a partir del 1 de enero de 2015 dejarían de extraer órganos «a los presos condenados a muerte». Tal fue; la justificación oficial a la enorme cantidad de órganos que se trasplanta van en el país a pesar de tratarse de una versión poco creíble teniendo en cuenta que nunca han dado datos de cuántos presos ejecutan al año y el hecho que la mayoría de los detenidos de ese país padece hepatitis B, lo que impide que muchos de sus órganos sean útiles para trasplantes.
David Matas denuncia además a pesar de ese anuncio oficial, lo cierto es que, no se cambió la legalización y de ahí que junto a Kilgour y Ethan decidieran actualizar sus datos y emitir el nuevo informe ahora presentado: » El resultado, es un texto de 680 páginas y 2.400 notas, pero en realidad no ha habido un cambio real. Tras el anuncio realizado el volumen de trasplantes no ha disminuido y la industria de trasplantes continúa a pleno ritmo. El volumen de trasplantes sigue siendo mucho más alto del que Reconoce el gobierno chino. Dada una cifra de 10.000 al año y nosotros hemos llegado a la conclusión de que son anualmente entre 60.000 y 100.000″.

La novedad es que en el nuevo informe se acusa directamente al Partido Comunista Chino de consentirlo y beneficiarse de ello. «La conclusión final de este informe actualizado -afirman- es que el Partido Comunista Chino ha involucrado al estado en La Matanza en masa de inocentes; especialmente de practicantes de la comunidad Falun Gong pero también de uigures, tibetanos y Cristianos con el fin de obtener órganos para trasplantar. Incluso teniendo en cuenta el volumen de trasplantes en el Gobierno chino, ha reconocido oficialmente que hay una sustancial discrepancia entre el número de trasplantes reales y el número de ‘ fuentes’ que el Gobierno de China ha identificado como son los presos condenados a muerte y los donantes voluntarios. Tal discrepancia es una de las razones -entre otras- que nos han llevado a la conclusión de que los grupos antes citados han sido la ‘fuente’ de muchos -de hecho de la mayoría- de los órganos utilizados para trasplantes».
Además: «Las pruebas que poseemos muestran un volumen mucho mayor de trasplantes del que admite el Gobierno de China. Y esa discrepancia nos lleva a concluir que ha habido una masacre aún mayor de la que creíamos de practicantes de Falun Gong«.
En el informe de 2016 se recogen otros testimonios que permiten entender el funcionamiento de esta industria de muerte. Como el de una persona que el 31 de marzo de 2006 escribió a la revista Epoch Times identificándose como médico militar de alto rango perteneciente al General Logistics Department del comando militar de Shenyang y decía: » La Comisión Militar Central del Partido Comunista de China tiene reglamentado desde 1962 -y sigue vigente hoy- que todo condenado a muerte o infractor de gravedad pueda ser tratado según necesidades del desarrollo nacional socialista de acuerdo al »’protocolo revolucionario»’. Añade también «La extracción de órganos de delincuentes graves quedó regulada por un reglamento complementario promulgado en 1984 y muchos de los departamentos locales de Seguridad Pública cumplieron con esos objetivos trasplantando directamente órganos e incinerar no luego los cuerpos. Tras 1992 el aumento de costes de las materias primas y el desarrollo de algunas industrias hizo que los cuerpos humanos se convirtieran en una materia prima valiosa. Es decir, los cuerpos -vivos o muertos- se convirtieron en materia prima». Y por si hubiera dudas agrega: » En la actualidad los miembros del Comité Central del Partido Comunista de China definen a Falun Gong como un tipo de enemigo y eso implica que no hay necesidad de informar sobre el trato que se les da. En otras palabras, al igual que los delincuentes más peligrosos los miembros de Falun Gong no son vistos como seres humanos sino como materia prima. Son una mercancía»

 

Pues bien, un mes después, concretamente abril de 2006, este mismo médico ampliaría su testimonio: «Cualquier persona elegida específicamente para el trasplante de órganos puede ser sacada de las prisiones, los campos de trabajo, los centros de detención, los campos secretos, etc. Sintiendo en ese momento su nombre real sustituido por un código. El siguiente paso es someterlo a un trasplante de órganos en vida. A esa persona ya no se la ve como un ser humano sino como un animal. Los médicos que participar en uno o dos casos pueden tener algún resquemor ético pero tras decenas de miles de trasplantes la destrucción de cuerpos vivos les vuelve insensibles».
Y para más inhumanidad agrega: «Los practicantes de Falun Gong y otros internos usan sus nombres reales durante la detención pero en el trasplante de órganos el nombre es ya falso. Se convierten en personas ficticias aunque la información sobre ellos sea completa. En el formulario de donación voluntaria de órganos aparece una firma pero obviamente la hace otra persona. He visto más de 60.000 de esas fichas falsificadas. Básicamente se dicen en ellas que la persona dona voluntariamente el órgano y acepta todas las consecuencias pero es obvio que muchas de esas firmas las ha hecho la misma persona».

CONCLUSIÓN

Sin duda alguna; existe mucha más información y veraz a pesar de que no se diga abiertamente que juzgan a inocentes a cadena perpetua con el fin de conseguir la valiosa mercancía. Son cuatro semanas que trato de acabar el artículo que abarca 9.872 palabras, pero reconozco que no soy capaz de terminarlo. Y es que, mi cultura al 50% es oriental, mis valores y mi honor me impiden acabar esta información teniendo en cuenta que aflora en mi el animal feroz que soy. Son muchos años los que dediqué a salvar vidas humanas y, ahora me dedico a cuidar la salud y acompañar hasta el final de sus días a nuestros ancianos. No es posible que en nuestra sociedad española se acepte la violación de los derechos humanos mientras se defiende a capa y espada la vida de los animales mientras los mismos asesinan a nuestro planeta con el consume de productos alimenticios y otros de aceite de palmera, no es aceptable que a su vez abandonen a los ancianos cuando sus cuerpos ya se vienen dependientes. Me niego a sufrir más con cada palabra más de este infernal e inhumano artículo mientras se acerca el gran DÍA DEL ORGULLO GAY, millones de personas se lanzarán a las calles disfrazados de amnésicos reivindicando su sexualidad, a su vez pasándose por el «forro» que ciudadanos inocentes por practicar una creencia religiosa son cazados como elefantes en África y convertirlos en meras mercancías para las mafias insaciables. Me avergüenza el ser humano y me repugna la sociedad española hipócrita y conservadora donde las haya. No soy responsable del lugar donde nací y reconozco que respeto España, pero ello no me convierte en una estúpida ignorante en aceptar y copiar el modelo de los demás ciudadanos españoles.  Me consta que soy un completo error, a la vez que me quiero y me acepto porque se cuales son mis límites, entonces mi comportamiento siempre es digno, rebelde y con honor. Espero acepten que no acabe el artículo porque soy vulnerable. Les dejo con afecto este vídeo, pues cada palabra es cierta.

UNA INDUSTRIA A GRAN ESCALA

 

NOTICIAS EL SEMANAL DE PENÉLOPE

2017-06-02_23.12.05
Noticias El Semanal de Penélope

 

¿LA DETECCIÓN TEMPRANA DEL CÁNCER CON UN ANÁLISIS DE SANGRE SERÁ POSIBLE EN 2019?

Una nueva compañía, respaldada por Bill Gates y Jeff Bezos, promete abaratar la batalla preventiva contra el cáncer

 

Descubrir la presencia de cáncer antes de que aparezcan sus síntomas es una de las grandes esperanzas en la lucha contra la enfermedad. Grail, una nueva compañía creada por Illumina, la mayor empresa del mundo dedicada a la secuenciación del ADN, promete poner en el mercado en 2019 un sistema de análisis de sangre capaz de detectar de forma temprana la presencia de cáncer. El objetivo de Grail no es solo desarrollar esa tecnología, sino que sea lo suficientemente barata como para universalizarla. Según Jay Flatley, consejero delegado de Illumina, su precio estará por debajo de los 1.000 dólares, y la compañía espera que, para 2019, el coste de la secuenciación de ADN baje lo suficiente como para situarlo en unos 500 dólares por análisis.

Grail -en referencia a «Holy Grail» o el «Santo Grial» de la lucha contra el cáncer- acaba de cerrar una ronda de financiación de cien millones de dólares, en la que Illumina y la inversa Arch Venture Partners han puesto la mayor parte del dinero, pero en la que también han participado dos pesos pesados del sector tecnológico: Bill Gates, cofundador de Microsoft, y Jeff Bezos, fundador y consejero delegado de Amazon.

La tecnología que utiliza Grail se denomina «biopsia líquida». En lugar de extraer una muestra de tejido de cáncer a través de una inyección o de cirugía, como en una biopsia convencional, se utiliza una muestra de sangre. A través de la secuenciación de ADN, se buscan fragmentos de ADN liberados por células cancerígenas. Si se encuentran señales de ADN de mutaciones que provocan cáncer, puede ser una señal de que se está formando un tumor, aunque todavía no haya síntomas ni se pueda percibir a través de un escáner. Si la técnica funciona sería un avance extraordinario; los mayores progresos contra el cáncer se han debido a cambios de hábitos -como dejar el tabaco- y al adelanto en la detección de tumores.

Financiación

La tecnología que utilizará Grail, sin embargo, no es nueva. Fue desarrollada por centros de investigación como la Universidad Johns Hopkins y la Universidad de Hong Kong. Tampoco es la única en conseguir financiación para desarrollar biopsias líquidas. Solo en la semana pasada, Guardant Health, consiguió cien millones de dólares y Exosome Diagnostics otros sesenta millones en rondas de financiación.

Incluso hay una compañía, Pathway Genomics, que ya los ofrece, aunque su caso ejemplifica los problemas de esta tecnología. Tan pronto como sus análisis salieron al mercado, la Administración de Fármacos y Alimentos de EE.UU. (FDA, en sus siglas en inglés) exigió que cumpliera con el proceso regulatorio y aseguró que no hay «ninguna evidencia demostrada de que este análisis o cualquier otro similar haya sido validado clínicamente como una herramienta de detección temprana del cáncer»

Illumina pretende conseguir esas evidencias y la aprobación regulatoria para 2019. Según Flatley, la compañía lleva 18 meses trabajando en sus análisis y todavía empleará otro año en investigaciones antes de empezar ensayos clínicos, en los que analizarán hasta 300.000 genomas humanos durante dos años.

Además de la importante inyección financiera, Illumina ha conformado un grupo de asesores de alto rango para Grail. Entre ellos está el español José Baselga, director médico del Memorial Sloan Kettering Cancer Center, que presidirá el consejo asesor científico. «Si esto funciona, podría cambiar las reglas del juego», ha dicho Baselga a «The New York Times». Baselga, sin embargo, se muestra escéptico ante la posibilidad de que estos análisis puedan detectar cualquier tipo de cáncer cuando empiecen a utilizarse y cree que serán efectivos en el diagnóstico de algunos tipos de cáncer.

Menos mamografías

En cualquier caso, la efectividad de la biopsia líquida para la detección temprana todavía es una incógnita. En la actualidad se usa sobre todo en pacientes a los que ya se ha diagnosticado el cáncer, para monitorear sus mutaciones o determinar qué tipo de fármaco usar. La detección temprana es más complicada porque hay otras células, no solo las cancerígenas, que liberan ADN al flujo sanguíneo, y hay células no cancerígenas que tienen mutaciones que también se detectan en tumores. También hay dudas porque muchos cánceres en fase temprana no son perjudiciales. Pero el tratamiento que se dé una vez detectados sí podrían causar daño al paciente. Este tipo de técnicas traerán el mismo debate que llevó a la Sociedad Americana del Cáncer el año pasado a recomendar menos mamografías y más tarde en la lucha contra el cáncer de mama.

Fuente: ABC

 

ENFERMEDAD DE ALZHEIMER

La respuesta inmune a las placas de beta-amiloide causa la neurodegeneración en el alzhéimer

La inhibición del componente C3 del sistema del complemento podría ser la clave para prevenir la pérdida de sinapsis y la muerte neuronal en las fases tardías de la enfermedad

En ocasiones, dar un gran paso hacia delante requiere de un pequeño pasito previo hacia atrás. Es lo que sucede, por ejemplo, en la jardinería, en la que para garantizar que las ramas de un árbol crezcan sanas y robustas primero hay que llevar a cabo una pequeña poda. Una situación muy similar a la que se produce durante el desarrollo de nuestros cerebros, en el que el ligero ‘recorte’ de las conexiones neuronales o ‘sinapsis’ facilita su posterior crecimiento. Una labor necesaria que lleva a cabo el sistema inmune y que, de reactivarse en etapas avanzadas de la vida, puede resultar muy perjudicial, cuando no fatal. Y es que como muestra un estudio llevado a cabo por investigadores del Brigham and Women’s Hospital de Boston (EE.UU.), este ‘refinamiento sináptico’ juega un papel muy importante en la aparición y progresión de las enfermedades neurodegenerativas, muy especialmente de la enfermedad de Alzheimer. De hecho, es muy posible que sea el sistema inmune, y no la acumulación de placas de proteína beta-amiloide, el responsable de la muerte neuronal característica de esta enfermedad –cuando menos en sus fases avanzadas.

Como explica Cynthia Lemere, directora de esta investigación publicada en la revista «Science Translational Medicine», «la deposición de placas de beta-amiloide tiene lugar muchos años antes de la pérdida de memoria en la enfermedad de Alzheimer, pero actuar sobre la manera en la que el sistema inmune responde a estas placas podría ser una excelente estrategia terapéutica. Creemos que en las últimas etapas del alzhéimer no son necesariamente las placas las que provocan la neurodegeneración, sino la respuesta del sistema inmune».

Bloquear la respuesta inmune

El nuevo estudio tuvo por objetivo analizar el papel que juega en el alzhéimer el componente 3 (C3) del sistema del complemento del sistema inmune. Y es que es bien sabido que el C3 colabora en la ‘poda’ de las sinapsis durante el desarrollo cerebral normal. Y asimismo, que este C3 se encuentra en cantidades muy elevadas en los cerebros de los pacientes con alzhéimer.

Entonces, y dado que la pérdida de sinapsis –que no la acumulación de placas de beta-amiloide– es el mejor indicador de la gravedad de la enfermedad, ¿puede suponerse que el C3 es responsable, aun parcialmente, de la neurodegeneración? Y lo que es más importante, el bloqueo de la cascada de reacciones bioquímicas del sistema del complemento –desde C1 a C9, pasando por C3– que tiene lugar durante la respuesta inmune, ¿pude proteger frente a la muerte neuronal y, por ende, prevenir el deterioro cognitivo en las fases avanzadas de la enfermedad?

En las últimas etapas del alzhéimer no son las placas las que provocan la neurodegeneración, sino la respuesta del sistema inmuneCynthia Lemere

Para responder a esta pregunta, los autores utilizaron un modelo animal –ratones– de enfermedad de Alzhéimer al que manipularon genéticamente para que no pudiera producir el C3. Y lo que observaron es que, como consecuencia directa de la ausencia de este C3, estos animales estuvieron protegidos frente a la pérdida de sinapsis y de neuronas asociada a la edad y presentaron menos marcadores de inflamación cerebral.

Es más; los resultados también mostraron que si bien los ratones manipulados y envejecidos siguieron presentando una elevada cantidad de placas de beta-amiloide en sus cerebros, sus funciones cognitivas mejoraron. De hecho, estos animales sin el C3 obtuvieron mejores puntuaciones en las pruebas de memoria y aprendizaje –todo ello a pesar de que tenían una mayor acumulación de placas que sus homónimos con el componente.

Diana terapéutica

La respuesta inmune a las placas de beta-amiloide, y no la acumulación de placas per se, es la responsable de la pérdida de sinapsis y del consecuente deterioro cognitivo en las fases avanzadas del alzhéimer. Tal es así que este C3, que además también se encuentra implicado en otros trastornos del sistema nervioso central como el ictus y la degeneración macular, se presenta como una diana terapéutica muy interesante para el abordaje del alzhéimer.

Como concluyen los autores, «si bien nuestro trabajo está limitado por las diferencias en el sistema inmune y en la esperanza de vida entre ratones y humanos, nuestros resultados sugieren que la modulación de la señalización del sistema del complemento puede representar una estrategia terapéutica potencial para combatir la enfermedad de Alzheimer».

Fuente: ABC. 31 de Mayo de 2017

 

 

Hallan una nueva vía prometedora para prevenir y revertir la calvicie

Los linfocitos T reguladores son los responsables de desencadenar que las células madre de la piel promuevan el crecimiento del cabello

 

Los linfocitos T reguladores –o ‘Treg’– son un tipo de glóbulo blanco especializado en regular la respuesta inmune inflamatoria. Sin embargo, parece que la labor defensiva, absolutamente esencial, que juegan los Treg el organismo no se limita a la lucha frente a los patógenos como los virus o las bacterias. También ayudan a protegernos frente a las inclemencias del tiempo. Y es como muestra un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de California en San Francisco (EE.UU.), los Treg son los responsables de desencadenar que las células madre de la piel promuevan el crecimiento sano del cabello. Tal es así que sin la participación de las Treg no es posible que las células madre regeneren los folículos pilosos, lo que conlleva a la aparición de la calvicie.

Como explica Michael Rosenblum, director de esta investigación publicada en la revista Cell, «nuestros folículos pilosos se están reciclando continuamente. Cuando un pelo cae, la totalidad del folículo piloso tienen que crecer de nuevo. Y si bien, tal y como se pensaba, se trata de un proceso completamente dependiente de las células madre, parece que los Treg son absolutamente esenciales. Si desactivas este tipo de célula inmunitaria, el pelo simplemente deja de crecer».

Regeneración capilar

Los Treg, tal y como sucede con muchos otros tipos de células inmunitarias, residen en los ganglios linfáticos. Sin embargo, algunos Treg han trasladado sus moradas permanentes a otros tejidos del organismo, en lo que han evolucionado para, además de llevar a cabo su característica labor reguladora del sistema inmune, colaborar en algunas funciones metabólicas. Por ejemplo, un estudio previo llevado a cabo por los mismos autores mostró que los Treg ayudan a establecer la tolerancia inmune frente los microorganismos no patógenos que habitan la piel en los ratones recién nacidos y liberan moléculas que facilitan la cicatrización en la etapa adulta del animal. Sin embargo, poco más se sabe de las funciones que llevan a cabo estos Treg en la piel.

Con objeto de ampliar este conocimiento, los autores utilizaron modelos animales –ratones– a los que, en primer lugar, manipularon para eliminar la presencia de Treg en la piel y, en segundo lugar, ‘raparon’ en algunas zonas para ver cómo la ausencia de estas células inmunes afectaba al tejido cutáneo. Un experimento que dio lugar a un resultado tan inesperado como sorprendente.

Las deficiencias en los Treg podrían ser responsables de la alopecia areata y jugar un papel en otras de calvicie como la alopecie androgénicaMichael

Como indica Michael Rosenblum, «inmediatamente nos dimos cuenta de que allí donde cortamos el pelo, este nunca volvía a crecer. Algo que nos llamó la atención y que nos impulsó a ir un poco más allá».

Los posteriores experimentos con técnicas de imagen revelaron que los Treg se relacionan estrechamente con las células madre que se encuentran en los folículos pilosos y posibilitan su regeneración. El número de Treg activos que rodean a las células madre de los folículos se multiplica por tres cuando estos folículos entran la fase de crecimiento de su ciclo normal de ‘descanso y regeneración’. Sin embargo, el papel de los Treg se limita a los primeros días –tres en el caso de los ratones– posteriores al corte del pelo. Y es que una vez transcurridos estos primeros días, en los que el pelo ya ha empezado a crecer, eliminar los Treg no tiene ningún efecto. Por tanto, parece claro que estas células inmunes son las responsables de desencadenar el mecanismo por el que las células madre de los folículos regeneran el cabello.

Como apunta el director de la investigación, «es como si las células madre de la piel y los Treg hubieran co-evolucionado, hasta el punto de que los Treg no solo protegen a estas células madre frente a la inflamación, sino que también toman parte en su labor de regeneración. De hecho, las células madre delegan totalmente en los Treg para saber cuándo es el momento de empezar la regeneración del cabello».

Areata o androgénica

Y este descubrimiento, ¿tiene alguna aplicación clínica potencial? Pues parece que sí. De hecho, los autores consideran que podría ayudar a tratar la alopecia areata, enfermedad autoinmune que interfiere con la regeneración de los folículos pilosos y provoca la pérdida de áreas de cabello en las cejas, rostro y cuero cabelludo de los afectados. Y asimismo, la alopecia androgénica, el tipo más común de calvicie en los humanos –sobre todo en varones.

En este contexto, numerosos estudios han mostrado que la mayoría de los genes asociados con la alopecia se encuentran relacionados con los Treg, así como que los tratamientos para potenciar la actividad de estas células inmunes son efectivos para tratar la enfermedad.

Como refiere Michael Rosenblum, «las deficiencias en los Treg podrían ser responsables de la alopecia areata y jugar un papel en otras formas de calvicie, incluida la alopecia androgénica. Un mejor conocimiento del papel crítico de los Treg en el crecimiento capilar podría conllevar al desarrollo de mejores tratamientos para la pérdida del cabello».

Fuente: ABC. 25 de Mayo de 2017

 

La Tierra está al borde de la sexta gran extinción, pero el hombre aún puede evitarlo

La humanidad debe adoptar nuevas políticas para seguir beneficiándose de los «servicios» que le proporciona la biodiversidad

Los científicos pronostican un futuro en el que habrán desaparecido muchas especies que son fundamentales para el bienestar del hombre Sebastian Wojnicki

Imagine una antigua carabela perdida en alta mar. Los marineros tienen frío y deciden quemar unos cuantos listones del barco para calentarse. Les parece más acuciante abrigarse que pensar en los mares que tendrán que recorrer en el futuro, así que poco a poco, queman cuerdas, velas y más maderos. El barco, cada vez más expoliado, parece resistir. Al menos hasta que se levanta la primera tormenta.

Parece un cuento, pero no lo es.  Esto es lo que el ser humano está haciendo en el planeta Tierra, la «nave» en la que la humanidad surca el frío e inhóspito espacio. Un total de ocho artículos científicos han analizado el impacto de las actividades humanas en la pérdida biodiversidad del planeta. Como si se tratara de las piezas de madera del barco, los investigadores han alertado del riesgo de que la pérdida de especies, hábitats y ecosistemas debilite al planeta y repercuta directamente en el bienestar del hombre. Pero, tal como han concluido los autores de estos trabajos, aún hay margen de maniobra para evitarlo.

«Las actividades humanas nos están acercando a la sexta extinción masiva de la historia del planeta Tierra», ha dicho Forest Isbell, investigador en la Universidad de Minessota  (EE.UU) y primer autor de uno de los artículos publicados este miércoles. «Y eso a pesar de que la diversidad de especies le proporciona al hombre muchos beneficios, como madera de los bosques, comida para el ganado o peces en los océanos y ríos».

Isbell ha repasado los trabajos más recientes que han estudiado los beneficios que obtiene el hombre de la riqueza de especies: por ejemplo, algunos han demostrado que reducir la biodiversidad de los bosques disminuye su capacidad de producción de madera.

<<La «anestesia tecnológica» nos hace pensar que podemos reemplazar todo lo que nos da la naturaleza con tecnología>

«La «anestesia tecnológica» nos hace pensar que podemos reemplazar todo lo que nos da la naturaleza con tecnología, pero la realidad es que no podemos sustituir todo», ha explicado a ABC José Antonio González, profesor de ecología en la Universidad Autónoma de Madrid. Pero, tal como reflejan los artículos publicados en Nature, esta idea está cada vez más superada: «Poco a poco, nos estamos dando cuenta de que nuestro modelo depende al cien por cien de la biodiversidad».

Basta con fijarse en la gran cantidad de «servicios» que proporciona un simple parque urbano: «la biodiversidad fija carbono, lo que contribuye a mantener el microclima, retiene el suelo, lo que controla la erosión, regula el ciclo hidrológico y contribuye a mantener agua en los embalses, es una oportunidad de recreación, depura el aire, proporciona madera, y, a veces, puede producir alimentos, como bellotas para los cerdos», ha enumerado González. «Y puedes encontrar montones de ejemplos en cualquier ecosistema al que mires bajo este filtro».

Cuestión de economía

Proteger especies no solo sería muy recomendable, sino que además sería rentable económicamente. Después de hacer cuentas, Isbell ha concluido que el hombre obtiene de la biodiversidad unas ganancias diez veces superiores al dinero que todos los países invierten en conservarla: «Por eso, creo que sería mucho más sabio invertir mucho más dinero en conservar la biodiversidad», ha dicho Isbell.

De hecho, una investigación dirigida por David Tilman y publicada en Nature ha concluido que hay margen de mejora en las políticas de conservación. Las medidas actuales han salvado a 31 especies de aves, en el último siglo, y han permitido que el 20 por ciento de las especies de vertebrados no se acerquen a la extinción. Pero su alcance podría ser mayor, según Tilman. Por ejemplo, el tamaño de la población de los leones en muchas partes de África ha caído hasta un 10 por ciento de su potencial, a causa de la presión humana y de problemas de presupuesto y de infraestucturas, pero con más esfuerzos estos números se podrían mejorar.

Preservar a la vez que se disfruta

La solución está en adoptar políticas alternativas que puedan reducir la presión sobre la naturaleza a la vez que se garantizan las necesidades humanas. Según Tilman, las iniciativas encaminadas a hacer la agricultura más sostenible, a reducir la deforestación y a proteger el medio natural, podrían preservar una gran parte de la biodiversidad restante de la Tierra, al mismo tiempo que las personas obtienen lo que necesitan de ella. Según sus cálculos, el planeta Tierra tiene capacidad de alimentar a 10.000 millones de personas, si se adoptan las políticas adecuadas.

Junto a Tilman, Terry Hughes ha estudiado en su artículo de Nature nuevas formas de proteger los arrecifes de coral, importantes y delicados puntos calientes de biodiversidad, cambiando las políticas de gestión e investigación. Por su parte, el artículo de Robert Pringle ha explorado el potencial de las zonas protegidas para preservar la riqueza de la Tierra, si se consigue que su gestión se implemente en el tejido cultural y económico de la sociedad.

«Hasta ahora se veía al hombre como el enemigo de la biodiversidad, y por eso las políticas de conservación se basaban en las restricciones y las barreras», ha opinado González. «Pero hay otro paradigma, que tiene que ver con vincular la sociedad y su modo de vida con la biodiversidad, y en hacer que la gente participe de los modelos de gestión y en la toma de decisiones. La meta es que las personas sean conscientes de que la protección de la biodiversidad les afecta directamente».

La tradición que conserva la naturaleza

Una de las formas de lograr esto es mirar hacia los modos de vida tradicionales, según el investigador de la Universidad Autónoma de Madrid. «Durante siglos, la gente ha acumulado conocimientos y ha convivido con modelos de gestión que han conservado la biodiversidad». Es el caso de las dehesas españolas, un medio creado por el hombre pero caracterizado por alcanzar un valor ecológico y una biodiversidad muy alta, gracias a «prácticas tradicionales que se han transmitido de generación en generación». Pero esto puede cambiar si se abandona el campo: «Si perdemos esta forma de vida perderemos las dehesas», ha alertado González.

No cambiar las políticas podría tener un coste tan alto que hipotecaría el futuro. Según la investigación dirigida por David Tilman, el número de especies amenazadas y desaparecidas aumentará mucho en las próximas cinco décadas, a causa del crecimiento de la población. La destrucción de los hábitats, la caza excesiva o la introducción de especies invasoras tendrán unos efectos muy graves sobre el estado de la naturaleza, tal como ha repasado el artículo de Forest Isbell.

Con cada especie perdida, la Tierra sería un poco más frágil. «La biodiversidad es la variedad de la vida en la Tierra, ya sean plantas, microbios, ecosistemas, procesos o genes», ha explicado José Antonio González. «Hay una relación muy clara entre la pérdida de biodiversidad y el aumento de vulnerabilidad de los ecosistemas, frente a alteraciones naturales o antrópicas (provocadas por el hombre). De hecho, los ecosistemas más ricos en diversidad son también los más estables y resilientes».

<<Los ecosistemas son el resultado de un largo proceso evolutivo, en el cual cada especie tiene una función concreta>>

En algunos casos los ecosistemas (el conjunto de las especies que viven en un determinado hábitat y las interacciones entre ellas y con su medio físico) parecen funcionar con normalidad, aunque por debajo, la destrucción esté provocando graves daños. A veces, los daños aparecen de repente, por ejemplo porque desaparece una especies clave, o porque hay cambios químicos que transforman el funcionamiento de toda la maquinaria. «Hay que tener en cuenta que los ecosistemas son el resultado de un largo proceso evolutivo, en el cual cada especie tiene una funcion concreta», ha explicado José Antonio González. Por eso retirar piezas de los engranajes puede tener unas consecuencias imprevistas.

Por ejemplo, en España hay cenentares de especies de abejas silvestres. En silencio y sin cobrar nada por ello, polinizan una gran cantidad de plantas interesantes para el hombre: manzanos, cerezos, girasoles, melones. Pero si la actividad humana va desmantelando a este valioso ejército de animales, ¿quién hará su trabajo el día de mañana?

Fuente: Revista Nature, Mayo de 2017

 

Confirman la existencia del horizonte de sucesos, el punto de no retorno de los agujeros negros

Un nuevo estudio apoya su presencia, después de no encontrar pruebas de que los agujeros negros tengan una superficie sólida

 

La Teoría General de la Relatividad de Einstein dibuja un Universo extraño, donde la masa de las estrellas de neutrones deforman el espacio-tiempo y curvan los rayos de luz. Donde la materia se acumula en tal cantidad en algunos puntos, que nada puede frenar su colapso total, a causa de la atracción de la gravedad. En esos puntos, llamados agujeros negros, aparece una singularidad cuyos secretos la ciencia no puede explicar. Y en su entorno, la gran acumulación de masa que se forma es capaz incluso de atrapar la luz y desgarrar el tejido del espacio-tiempo. Esta última frontera, a partir de la cual nada, ni siquiera la luz, puede escapar del agujero negro, es conocida como horizonte de sucesos. Es, sin duda, la frontera definitiva.

La propia naturaleza del horizonte de sucesos tiene a los científicos sumidos en la oscuridad, hasta tal punto que este límite sigue siendo hoy en día una frontera teórica. Este martes, un estudio publicado en la revista «Monthly Notices of the Royal Astronomical Society» ha presentado una nueva confirmación de la existencia de este horizonte de sucesos. Científicos de la Universidad de Texas, en Austin (EE.UU.) han simulado qué ocurriría si la superficie de los agujeros negros fuera sólida, y las estrellas chocasen contra ellas en vez de ser engullidas. La investigación, que ha concluido que deberíamos de haber observado las huellas de estas colisiones a través de los telescopios, se ha convertido en una nueva prueba de que la Relatividad de Einstein funciona a la hora de explicar el Universo.

«Nuestra intención era confirmar a través de experimentos la idea del horizontes de sucesos», ha dicho en un comunicado Pawan Kuwar, astrofísico en la Universidad de Texas.

Agujeros negros sólidos

Una forma de hacerlo es tener en cuenta una hipótesis que han planteado algunos científicos, y según la cual en realidad la superficie de los agujeros negros es sólida. ¿Qué pasaría si los agujeros acumularan enormes cantidades de masa pero no colapsaran? Una de las consecuencias es que serían sólidos, y que las estrellas atraídas por ellos no serían engullidas, sino que sencillamente quedarían destruidas en una colisión brutal.

¿Y si en vez de agujeros negros, en el centro de las galaxias hubiera objetos sólidos muy masivos? Las estrellas chocarían contra ellos
¿Y si en vez de agujeros negros, en el centro de las galaxias hubiera objetos sólidos muy masivos? Las estrellas chocarían contra ellos– Mark A. Garlick/CfA

«No queríamos afirmar que los agujeros tengan una superficie sólida», ha explicado Kumar. «Sino llevar al conocimiento hasta los límites y encontrar evidencias concretas de que, realmente, hay un horizonte de sucesos en los agujeros negros».

¿Cómo saberlo? Si nada puede escapar del horizonte de sucesos, ¿qué pruebas directas podemos obtener de su existencia? Unos astrónomos están tratando de obtener a primera imagen nítida del horizonte de sucesos del agujero negro supermasivo de la Vía Láctea, Sagitario A*. Pero Kumar y su equipo han probado una aproximación distinta: si los agujeros negros fueran sólidos, los telescopios deberían captar las explosiones generadas en los choques de las estrellas. Pero si no se encuentran es porque, en efecto, están rodeados por un horizonte de sucesos.

Explosiones en el espacio

Las simulaciones por ordenador concluyeron que si eso ocurriera, el gas de las estrellas moribundas cubriría el agujero negro durante meses, o quizás años, emitiendo importantes cantidades de energía. Como casi cada galaxia tiene en su centro un agujero negro supermasivo, este fenómeno debería poder verse con cierta frecuencia por ahí fuera.

Después de una colisión, la superficie de los objetos masivos y sólidos brillaría de forma dramática durante meses o años
Después de una colisión, la superficie de los objetos masivos y sólidos brillaría de forma dramática durante meses o años– Mark A. Garlick/CfA

«Estimamos la tasa de caída de estrellas hacia agujeros negros supermasivos», recordó Wenbin Lu, otro de los investigadores que ha participado en el estudio. «Casi cada galaxia tiene uno. Nosotros solo tuvimos en cuenta los más masivos, que superan los 100 millones de masas solares. De estos hay por lo menos un millón, en una distancia de tan solo miles de millones de años».

El telescopio Pan-STARRS, situado en Hawái, recogió datos útiles para saber si estas colisiones estaban ocurriendo en el espacio. Sus lentes observaron un importante área del cielo durante un periodo de 3,5 años, de busca de fenómenos transitorios («transients», en inglés), fenómenos que brillan durante un tiempo corto y luego se desvanecen.

«Nosotros calculamos cuántos de estos fenómenos transitorios habría captado el Pan-STARRS en un periodo de 3,5 años en su zona. Concluimos que debería de haber descubierto diez de ellos para justificar la teoría del agujero negro sólido», explicó Lu.

Pero, ¿cuántos fenómenos transitorios captó el Pan-STARRS? Ninguno.

«Nuestro trabajo implica que algunos agujeros negros, o quizás todos, tienen un horizonte de sucesos, y que la materia que cae en ellos realmente desaparece del Universo observable, tal como hemos considerado durante décadas», ha concluido Narayan. Por eso, ha dicho: «La Relatividad General ha pasado otra prueba». Por si acaso, estos investigadores usarán un telescopio más potente para seguir buscando este tipo de fenómenos transitorios.

Fuente: ABC. 30 de Mayo de 2017

 

Un telescopio «tan grande como la Tierra» podría conseguir la primera imagen de un agujero negro

Doce antenas tratarán de ver la superficie del agujero negro del centro de la Vía Láctea y comprobar la validez de la Teoría de la Relatividad

Un equipo internacional de astrónomos se está preparando para conseguir la primera imagen de la historia de un agujero negro. El proyecto, que aspira a obtener la fotografía partir de 2018, será fruto de la colaboración entre 12 radiotelescopios de todo el mundo, universidades, agencias, el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, en inglés) y 100 investigadores de todo el mundo, entre otros. En teoría, el trabajo coordinado de varias antenas receptoras permitirá conseguir el rendimiento de un radiotelescopio tan grande como el planeta Tierra.

Sería una forma de poner a prueba las predicciones de la Relatividad General

Este gigantesco y virtual instrumento recibe el nombre de Telescopio del Horizonte de Sucesos (EHT, en inglés). Está previsto que se ponga en marcha del 5 al 14 de abril, fecha en la que tratará de obtener una imagen de Sagitario A, el agujero negro supermasivo que se encuentra en el centro de la Vía Láctea.

Pasados unos meses, los datos serán cruzados en un superordenador. Entonces se podría obtener la primera reconstrucción del horizonte de sucesos de un agujero negro, esa región que marca el punto de no retorno de estos objetos: por debajo de él, la gravedad del agujero es tan intensa que la luz no puede escapar, pero por encima de esta barrera virtual, sí.

Esto podría tener consecuencias muy importantes. En teoría, poder ver por primera vez el horizonte de sucesos sería una forma de poner a prueba las predicciones de la Relatividad General.

¿Los agujeros negros son invisibles?

Hay que tener en cuenta que los agujeros negros son invisibles, puesto que son tan masivos que son capaces de atrapar la luz. Solo se detecta su presencia cuando algo cae en su interior y emiten potentes oleadas de radiación, o bien cuando deforman el espacio-tiempo y generan un efecto de lente gravitacional. Por eso hasta ahora solo se han podido ver de forma indirecta, y nunca se ha alcanzado su superficie, el horizonte de sucesos

Los investigadores esperan que la imagen que crearán será similar a un anillo rodeando una gran gota negra. Es posible que ese anillo tenga forma de luna, a causa del efecto Doppler. Este se produce porque la materia que forma el disco tiene distintas velocidades en relación con la Tierra y esto distorsiona la forma como se observa. El efecto es parecido (aunque con muchas diferencias) al que pasa con el sonido de la sirena de una ambulancia: este suena distinto en función de la velocidad que lleve el coche, sobre todo dependiendo de si se acerca o se aleja de nosotros.

Simulaciones hechas por el equipo del Telescopio del Horizonte de Sucesos (EHT
Simulaciones hechas por el equipo del Telescopio del Horizonte de Sucesos (EHT– NASA/UMass/D.Wang et al., IR: NASA/STScI / Feryel Ozel

Aunque los datos se recogerán en abril de este año, los científicos no esperan obtener el resultado hasta 2018, a causa de la dificultad de procesar toda la información. Entre otras cosas, habrá que poner en común los datos recogidos por muchos telescopios. Se hará a través de una sofisticada técnica (conocida «Very long baseline array interferometry»), gracias a la cual instrumentos separados por continentes enteros se sincronizarán y funcionarán como si fueran una antena gigantesca.

Para que todo salga bien, será necesario que la meteorología acompañe y que toda la tecnología implicada funcione. Entre otras cosas, los científicos tendrán que usar relojes atómicos de precisión extrema y un superordenador para procesar los datos. La complejidad que supone esto explica que el proyecto lleve ya 20 años en marcha.

Foto al agujero negro supermasivo

La recompensa será analizar con detalle el agujero negro supermasivo Sagitario A. Es un cuerpo enorme, que tiene unos 20 millones de kilómetros de ancho (unas 30 veces más que el Sol), pero están tan lejos de la Tierra, a 26.000 años luz de distancia, que en el cielo ocupa una fracción mínima. Además de ser grande, se cree que es muy masivo: él solo acumula 4 millones de masas solares.

Imagen en rayos X de Sagitario A
Imagen en rayos X de Sagitario A– Observatorio Chandra de Rayos X/NASA

Según los cálculos de los astrónomos, Sagitario A ocupa un espacio tan pequeño como la punta de un alfiler en el cielo estrellado. Se cree que a su alrededor el espacio-tiempo está deformado y que por eso su imagen podría estar amplificada y distorsionada hasta formar una «sombra» de 50 millones de kilómetros. Desde la Tierra, ver esto sería como ver una naranja en la superficie de la Luna, según cálculos de Heino Falke y Fulvio Melia, del Instituto Max Planck de Radio Astronomía y de la Universidad de Arizona, respectivamente.

De hecho, este pequeño tamaño es la principal (pero no única) causa de que hasta ahora no se haya podido obtener una imagen del horizonte de sucesos. En radioastronomía se cumple la regla de que cuanto mayor sea la antena, mayor resolución o magnificación se alcanza. Por eso, la solución pasa este asunto pasar por construir un radiotelescopio virtualmente tan grande como la Tierra, por una parte, y por otra, por buscar el mayor agujero negro posible.

Estos son Sagitario A y el agujero negro supermasivo del centro de la galaxia elíptica M87, que es, de hecho, el segundo objetivo de este proyecto.

Actualmente, se cree que los agujeros negros residen en el corazón de la mayoría de las galaxias y en sistemas binarios (de dos estrellas) que emiten rayos X. Otras veces parecen ser los causantes de los famosos estallidos de rayos gamma.

Sea como sea, estudiarlos es clave para la física y la astronomía: son fundamentales para comprender la evolución de las estrellas, la formación de las galaxias y la naturaleza del espacio-tiempo.

 

 

Captan la muerte más lenta de una estrella devorada por un monstruoso agujero negro

Ha durado diez veces más que los procesos similares más duraderos. Creen que es un fenómeno inusual, provocando la muerte de una estrella muy grande o que fue totalmente engullida

 

Cuando una incauta estrella pasa por las cercanías de un agujero negro, no es raro que acabe desgarrada y convertida en un aperitivo para la oscuridad insondable. Antes de morir, algunos de sus pedazos saltan a gran velocidad hacia el espacio, mientras que otros se calientan antes de caer hacia el interior del agujero y emitir un potente «grito» en forma de rayos X. Después de eso, este material atraviesa el horizonte de sucesos y desaparece del espacio-tiempo.

Este «grito» de rayos X ha permitido a unos investigadores averiguar que ahí fuera, un agujero negro está embarcado en el banquete más largo nunca observado hasta la fecha. El proceso ya lleva más de 10 años produciéndose y es 10 veces más largo que cualquier otro conocido hasta ahora.

«Hemos sido testigos de la larga y espectacular muerte de una estrella», ha dicho en un comunicado Dacheng Lim, primer autor del estudio e investigador en la Universidad de New Hampshire (Estados Unidos).

En concreto, los científicos han presenciado un evento de disrupción de marea, un fenómeno que ocurre cuando la gravedad desgarra una estrella y que ha sido observado muchas veces desde los años noventa. «Pero ninguno fue, ni de cerca, tan largo como este», ha dicho Lim.

Varios telescopios de Rayos X (como el Chandra, el satélite Swift y el XMM-Newton (de la ESA) permitieron ver este crimen con extremo detalle. Ocurrió en las proximidades de un agujero negro supermasivo llamado XJ1500+0154 y localizado en el centro de una pequeña galaxia situada a 1.800 millones de años luz de la Tierra, en la constelación de Virgo.

Representación de un evento de disrupción de marea, en el que una estrella es desgarrada al pasar por las cercanías de un agujero negro supermasivo
Representación de un evento de disrupción de marea, en el que una estrella es desgarrada al pasar por las cercanías de un agujero negro supermasivo– ESO, ESA/Hubble, M. Kornmesser

Lo que se pudo ver, sorprendió mucho a los científicos. Si normalmente las estrellas emiten un destello de rayos X que se desvanece al cabo de un año, en esta ocasión la llamarada duró más de una década.

Creen que esto indica que, o bien la estrella desgarrada es mucho más masiva que las otras cuya muerte se ha observado, o bien que esta es la primera vez en que se observa cómo una estrella entera es desgarrada y engullida.

Apetito insaciable

Además, los datos de rayos X han mostrado que el agujero negro creció por encima del límite de Eddington, marcado por el equilibrio hidrostático establecido entre la radiación del gas caliente y el tirón gravitacional.

La conclusión de que los agujeros negros supermasivos pueden crecer tan rápido, gracias a estos eventos de disrupción de marea, ayudaría a explicar el rápido crecimiento observado en estos misteriosos cuerpos cuando el Universo tenía menos de 1.000 millones de años. O, como ha dicho Stefanie Komossa, otra coautura del estudio e investigadora en la «QianNan Normal University for Nationalities», en Duyun (China), las increíbles tasas de crecimiento de los agujeros negros «muestran lo precoces que pueden ser».

«Durante casi todo el tiempo en que hemos estado mirando a este objeto, ha estado creciendo rápidamente», ha dicho James Guillochon, coautor del trabjo e investigador en el centro Harvard-Smithsonian de Astrofísica en en Cambridge (Estados Unidos). «Esto nos dice que algo inusual, probablemente una estrella más o menos dos veces más masiva que el Sol, está alimentando al agujero negro».

Los investigadores han predicho que el brillo de rayos X originado en el banquete se reducirá notablemente esta década. Y así, la estrella que fue engullida hace unos 1.800 millones de años, será historia definitivamente.

Fuente: Nature Astronomy